Cuando asoman los primeros polvorones y las primeras tabletas de turrones por las calles de los supermercados, se puede decir que se va acercando las Navidades. Cuando Comprigur comienza a mover sus Lotes y Cestas de Navidad, ahí sí que sí podemos decir que estamos en época de Navidad.
Yo soy una de esas personas que, año tras año, me adelanto un poco más a la organización de estas fiestas Navideñas que suelen ser agridulces a medida que pasan los años, porque cada vez hay más personas ausentes en nuestras mesas.
En mi familia no se celebra la Navidad en plan lujoso, pero si se celebra a lo grande en cuanto a familia reunida se refiere. Me encanta la Navidad porque es una época que con sus dosis de nostalgia y tristeza, me resultan divertidas, alegres, llenas de ilusión y de esperanza.
Desde que tengo uso de razón, la Navidad siempre la he asociado a los lotes de Navidad. Me he criado viendo, año tras año, Navidad tras Navidad, la Cesta de Navidad que le regalaban a mi padre en su trabajo.